Fue el 3 de mayo en el día del albañil
Sin tener título profesional, son capaces de edificar una casa
Los otros maistros también tuvieron su festejo
Marco Antonio Alcaraz Rodríguez
Va a dar la una de la tarde y uno de los encargados de la edificación de unas casas del fraccionamiento Las Américas, allá en Ecatepec, va recorriendo la zona comunicando: "Maistros, apúrense po rque ya va a empezar la misa en la escuela que estamos haciendo".
Y es que es un día especial para estos maistros que de lunes a viernes trabajan desde las 8 de la mañana a las 6 de la tarde, desempeñando su labor bañados en sudor entre los andamios cargando botes de la mezcla en el hombro, en el ir y venir maniobrando carretillas de grava, arrastrando las mangueras de agua en donde se necesita, etcétera.
En este lugar del estado de México los encargados de la obra organizaron una comida para festejar a los mais, que con música y canciones como fondo de Los Tucanes, disfrutaron del consomé, barbacoa, arroz, carnitas, refrescos y otro platillos que acompañaron con refrescos, cosa rara, imperó la ley seca.
Uno de los comensales, Constantino Olvera Flores, quien tiene 35 años de edad, y 10 como carpintero, comentó que le gustaría ser contador público, "pero no puedo asistir a la escuela por la chamba, tengo que cuidarla, que aunque no me pagan lo suficiente, me da para mantener a mi familia".
En tanto a Jaime Martínez, del estado de Michoacán, y que su trabajo es de detallista, la política no le interesa mucho, pues señaló que los políticos "hacen muchas promesas y no cumplen, sólo llegan a robar".
En todo el país el día del albañil se festeja anualmente el 3 de mayo, la celebración se relaciona con el día de la Santa Cruz, patrona de los trabajadores de la construcción. Como parte de dicha celebración los albañiles preparan una cruz de madera adornada con flores misma que lleva a bendecir, para después colocarla en lo alto de los edificios, o casas en construcción. Esta tradición data desde la época colonial.
Algunas de estas personas que empezaron como macuarros -así se dicen entre ellos- ni siquiera terminaron la primaria, pero tienen la capacidad de construir casas, debi do a la diversidad de oficios que se ejercen en este campo de la construcción y que lo aprenden como: la carpintería, la herrería, la soldadura, los herrajes con la varilla para emparrillar la losa, la electricidad, entre otros.
Según el INEGI, la edad promedio de este grupo de población es de 41 años.
De cada 100, 55 son adultos de entre 30 y 49 años; 25 tienen 50 y más años y 20 reportan una edad de 12 a 29 años.
Año 4 Num. 48 Fecha de publicación: Mayo de 2006 |